Plato principal

Pavo asado en cazuela con una rica salsa de colmenillas y setas de ostra condimentada con vinagre balsámico.

Se cocinan al vapor y resultan mucho más ligeras que las brochetas que se hacen a la parrilla.

Hacer un pollo asado sabroso es bien fácil. En este caso, las hierbas le dan el toque justo.

Una de las recetas favoritas para la barbacoa, ya sean costillas de buey o de cerdo. El truco para que queden tan tiernas que se deshagan en la boca es cocerlas primero para después terminarlas sobre la brasa.

Las vieiras a la pimienta rosa pueden servirse como aperitivo, primer plato o plato principal.

Almejas en una sabrosa salsa con ajo, perejil y vino blanco.

El pollo a la parrilla no necesita más que una salsa, unas patatas fritas y una ensalada para convertirse en una magnífica comida. Claro que asar un pollo entero a la parrilla solamente puede hacerse con aves jóvenes.

El pollo tiene carne blanca que necesita algo que la anime para no resultar aburrida y en este caso la mantequilla a las hierbas mejora maravillosamente su sabor.

Tiernos trozos de salmón y rape marinados en zumo de limón y mostaza integral, asados a la parrilla con gambas y acompañados con salsa fresca de pimiento, cebolla y perejil.

Este plato se puede servir en cuallquier momento. Se congela muy bien, así que si se cocina doble cantidad y se congela una parte, el día que no apetezca ponerse el delantal, basta con calentar y comer.

Carne que se cocina en una velouté de champiñones, bien condimentada con queso rallado y pimentón y pimienta, que se termina con nata agria.

Esta receta se puede hacer aprovechando los restos de carne, verdura y hortalizas que quedan después de haber servido un asado tradicional con todas sus guarniciones.