Conservar el café ya hecho puede convertirse en todo un reto, especialmente si quieres mantener su sabor y aroma originales. Afortunadamente, hay algunas estrategias que puedes seguir para lograrlo.
Uno de los factores más perjudiciales para la conservar el café en condiciones óptimas es el calor. Con temperaturas altas, el café se oxida antes, lo que conlleva la pérdida de sabor; por eso, refrigerarlo es la estrategia más efectiva. Conviene enfriarlo a temperatura ambiente lo más rápido posible para guardarlo después en la nevera. Debe guardarse siempre en un recipiente cerrado herméticamente. Esto ayuda a mantener el sabor y el aroma del café intactos y evita que los demás alimentos se impregnen de ese aroma y sabor.
Es importante recordar que la parte trasera del frigorífico suele ser la más fría, por lo que es el mejor lugar para guardar el café.
En cuanto al tiempo, el café que ha sobrado puede estar en el refrigerador de forma segura durante aproximadamente una semana. Basta con calentarlo otra vez antes de usarlo.
Si no se tiene un recipiente hermético ni nevera, se debe intentar guardar el café ne un recipiente que no deje pasar la luz, en un lugar fresco y seco. Esto ayudará a evitar que el café se oxide y pierda su sabor.
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Refrigerado
Conservar el café ya hecho puede convertirse en todo un reto, especialmente si quieres mantener su sabor y aroma originales. Afortunadamente, hay algunas estrategias que puedes seguir para lograrlo.
Uno de los factores más perjudiciales para la conservar el café en condiciones óptimas es el calor. Con temperaturas altas, el café se oxida antes, lo que conlleva la pérdida de sabor; por eso, refrigerarlo es la estrategia más efectiva. Conviene enfriarlo a temperatura ambiente lo más rápido posible para guardarlo después en la nevera. Debe guardarse siempre en un recipiente cerrado herméticamente. Esto ayuda a mantener el sabor y el aroma del café intactos y evita que los demás alimentos se impregnen de ese aroma y sabor.
Es importante recordar que la parte trasera del frigorífico suele ser la más fría, por lo que es el mejor lugar para guardar el café.
En cuanto al tiempo, el café que ha sobrado puede estar en el refrigerador de forma segura durante aproximadamente una semana. Basta con calentarlo otra vez antes de usarlo.
Si no se tiene un recipiente hermético ni nevera, se debe intentar guardar el café ne un recipiente que no deje pasar la luz, en un lugar fresco y seco. Esto ayudará a evitar que el café se oxide y pierda su sabor.