Lavar el pollo

De hecho, lavar el pollo crudo puede aumentar el riesgo de intoxicación alimentaria. Hay dos razones por las que no se recomienda lavar el pollo. La primera razón es que al lavarlo le quitas su capa protectora natural a la carne y es más fácil que las bacterias la colonicen. La segunda razón por la cual no se recomienda lavar el pollo es evitar la dispersión de patógenos.

El campylobacter es un tipo de bacteria que suele encontrarse en el pollo crudo. Cuando se lava el pollo crudo, el campylobacter puede extenderse fácilemente a otras superficies y contaminarlas. Esto significa que si no te lavas bien las manos después de manipular el pollo crudo, puedes acabar con el campylobacter en las manos. Si luego tocas otra cosa, como el pomo de una puerta o una encimera, podrías contaminar esa superficie con campylobacter.

Lavar el pollo crudo también puede hacer que el campylobacter se extienda por el fregadero y las encimeras. Esto significa que aunque te laves las manos después de manipular pollo crudo, puedes acabar con campylobacter en tus manos.

La mejor manera de evitar que el campylobacter se propague es no lavar el pollo crudo. En vez de lavaralo, cocina el pollo a fondo para matar cualquier bacteria que pueda estar presente.

Al lavarlo el agua salpica alrededor y puede llegar a salpicar incluso a los platos y cubiertos limpios que están secándose alrededor de la pila. Si la carne de pollo estuviera ya contaminada, esas gotas de agua transportan los patógenos a cualquier superficie que salpiquen. Teniendo en cuenta que hay muchas cocinas con pilas pequeñas y que la carne de pollo es una de las que se contaminan con salmonella más fácilmente, lo mejor es no lavarla y cocinarla  directamente.

Los riesgos de no lavar el pollo antes de cocinarlo son relativamente bajos. Sin embargo, si no te lavas bien las manos después de manipular el pollo crudo, podrías acabar con el campylobacter en tus manos y transferirlo a otras superficies de tu casa.

Si no tienes más remedio que lavarlo

Elimina primero toda la suciedad o los restos visibles. A continuación, aclara el pollo bajo el grifo de agua fría durante al menos 30 segundos. Por último, seca el pollo con una toalla de papel limpia o un paño de cocina.

Para evitar infecciones al manipular y cocinar pollo

• Lávate bien las manos con agua y jabón después de manipular el pollo crudo.
• Mantén el pollo crudo separado de otros alimentos en la cocina.
• Limpia muy bien todos los utensilios y superficies que usaste para preparar pollo crudo. Lávate las manos con agua y jabón.
• Al guardar el pollo en la nevera, asegúrate que la temperatura es menor de 5º C.
• Cúbrelo bien para que no pueda gotear ningún líquido sobre otros alimentos desde el pollo.
• Cocina el pollo hasta que alcance una temperatura interna de más de 74º C.
• Refrigera o congela el pollo dentro de las dos horas siguientes a su cocción.

Estas recomendaciones se deben aplicar también al manipualr y cocinar otras aves, desde el pavo a las codornices.

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