La comida mexicana y la salud
La cocina mexicana ofrece muchos platos que son muy recomendables para una dieta sana.
La comida mexicana tiene la reputación de ser rica en grasas y alta en calorías. Esa reputación puede ser merecida. Una sola chimichanga de carne y queso chimichanga puede tener aproximadamente 445 calorías y es rica en sodio y grasa. Incluso un taco pequeño tiene alrededor de 400 calorías y pueden ser ricos en grasa, especialmente cuando están cargados de nata agria.
Pero hay muchas otras opciones en la cocina mexicana. Hay platos y métodos de preparación que proporcionarán un montón de sabor aun teniendo un rango muy alto en el barómetro de la salud. En la amplia gama de alternativas que ofrece el menú mexicano, hay muchos platos que son bajos en carbohidratos, o bajos en grasa, o bajos en calorías, y a menudo las tres cosas a la vez.
La salsa, por ejemplo, es un complemente nutritivo y sano a cualquier comida. Se hace principalmente con zanahorias y tomates, que son ricos en vitaminas A y C, muy bajos en grasa y muy sabrosos. Incluso los crujientes triángulos de tortilla de maíz que se mojan en las salsas pueden ser bajos en grasas y bajos en calorías cuando se hacen en el horno, en vez de freírse. Y aun así pueden resultar muy apetitosos cuando están acompañados de la salsa correcta. Y el maíz es una gran fuente de tiamina, ácido fólico y otros nutrientes.
Los chiles jugar un papel estrella en la cocina mexicana y ocultan en su interior mucho más que la sensación picante. Contienen una gran variedad de compuestos fito-químicos, incluyendo potentes antioxidantes, y son ricos en vitamina C, B6 y otros nutrientes. Y casi 0 calorías cuando se consumen sin la adición de aceite, pues son bajos en grasa.
Pero, incluso platos principales de la cocina mexicana pueden aportar un gran valor nutricional a la vez que se mantienen bajos en grasas y calorías.
El pescado, por ejemplo, es el ingrediente principal en un gran número de platos mexicanos. El ceviche es un plato tradicional de la cocina mexicana y peruana. Es comparable al sushi japonés pues en ambos casos los frutos del mar se consumen crudos. Estos frutos del mar pueden ser langosta, camarones, moluscos, y pescado, que se han marinado en zumo de cítricos. El ácido cura la carne dándole menos sabor a "pescado crudo" que en el caso del sushi, y nada podría ser más saludable. Pescados y mariscos son ricos en ácidos grasos esenciales del tipo omega-3.
Incluso el burrito tradicional del Norte de México puede convertirse en una comida saludable con sólo una modesta cantidad de cambios. En lugar de cargarlo de nata agria convencional, se puede utilizar un tipo bajo en grasa, o se puede utilizar yogur. Y rara vez se nota una grand diferencia en el sabor. En lugar de carne picada de buey, cargada de grasa saturada, se puede utilizar carne de pavo o un substituto de soja. Y se puede escoger queso fresco, bajo en grasa, y el resultado seguirá siendo igualmente sabroso.
Muchas bebidas mexicanas pueden tener muchas calorías, pero eso también es un problema fácil de resolver.
El rompope es una deliciosa bebida a base de ron, servida a menudo como licor después de la cena. Como se prepara con yemas de huevo, azúcar y leche, realmente puede sumar una buena pila de calorías. Pero el utilizar un sustituto del azúcar puede fácilmente reducirlas a la mitad con una diferencia de sabor apenas perceptible. Y si se usa leche semi-desnatada tampoco se echa a perder la bebida.
Hay muchas formas creativas para poder disfrutar del gran sabor de la gastronomía mexicana, evitando calorías no deseadas. Tomando unas pocas decisiones cuidadosamente se pueden conseguir deliciosos y variados beneficios para la salud sin pagar la multa.
