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Congelar

Los alimentos congelados conservan casi todas sus propiedades. Son la mejor opción después de los alimentos frescos.

Además de ser la forma de terminar bebidas y postres helados, la congelación es una forma maravillosa de conservar alimentos y platos ya cocinados. No todos los alimentos fueron creados iguales desde el punto de vista del congelador. Algunos alimentos se congelan muy bien, otros no tanto. Lo mismo ocurre con los platos preparados.

La razón por la cual unos alimentos se congelan mejor que otros se debe, en parte, a su contenido de agua. En general, a medida que aumenta el contenido de agua, la calidad del alimento congelado baja. Una naranja o una sandía que se han congelado, tienen textura y sabor harinosos al comerlas descongeladas.

Carne

La carne es un alimento excelente para conservar congelado. La carne se congela tan porque es muy densa y tiene poco espacio para que haya burbujas de aire. Un filete de alta calidad, o incluso uno de baja calidad, se conservarán al menos 4 meses congelados. La carne cruda se conserva mucho mejor congelada que la cocinada, aunque la carne cocinada tampoco se congela mal.

Verduras y hortalizas

Parece difícil creerlo, pero las verduras congeladas pueden ser más frescas que las verduras frescas que se compran en el supermercado. Esto se debe a que se estas verduras se recogen y se congelan en su punto óptimo. El procedimiento consiste en blanquearlas en agua hirviendo durante 1-2 minutos, dejarlas enfriar a temperatura ambiente y luego congelarlas.

Al escaldar las verduras el color se hace más brillante y casi no se pierden nutrientes porque se hierven durante muy poco tiempo. Una vez congeladas, se detiene toda la actividad, que se reanudará al descongelarlas y cocinarlas.

Es importante recordar que las verduras y hortalizas se deben congelar individualmente hasta que estén duras. Es entonces cuando se meten en una bolsa para que terminen de congelarse. Así se evita que las verduras se conviertan en un bloque de hielo difícil de manejar, y más tarde se podrá escoger fácilmente el número de piezas que se desea descongelar y cocinar.

Fruta

La fruta debe estar bien lavada. Muchas frutas se congelan mejor si se blanquean en agua hirviendo antes.

Una forma de congelar la fruta de hueso, como los albaricoques, melocotones y nectarinas, es lavarla, quitarle el hueso y cubrirla con un almíbar hecho con 600 g de azúcar por cada litro de agua. Una vez congelada durará 12 meses. Este método también se puede usar con fruta blanda o bayas.

Para congelar fresas y frambuesas, se lavan, se les quitan los tallos y se extienden sobre papel encerado o papel de aluminio. Se cubren con azúcar y se congelan. Se pasan a bolsas de plástico una vez congeladas. Se conservarán bien 12 meses.

¿Qué alimentos no son buenos para congelar?

La mejor manera de pensar qué alimentos se congelan mejor es pensar en la calidad que tienen cuando se descongelan. Esto depende en gran parte de como sea su contenido líquido. Una sopa se compone principalmente de agua y al derretirse el hielo que se forma al congelarse vuelve a ser el caldo base. Una hoja de lechuga tiene un alto contenido en agua, pero esa agua “rompe” la lechuga al convertirse en hielo y se pierde al descongelarse, el resultado no es una hoja de lechuga crujiente, sino algo flácido y poco apetitoso. Los productos lácteos tienden a separarse cuando se congelan.

Comidas para congelar

Al igual que ocurre con los alimentos, algunos platos se congelan y descongelan muy bien, mientras que otros no son capaces de mantenerse unidos en ambiente helado del congelador.

La mejor forma de estimar si una comida se va a congelar bien es fijarse en las comidas preparadas que se ven en los congeladores de los supermercados.

Casi cualquier comida horneada puede congelarse, ya sea casi en crudo, parcialmente cocinada o totalmente cocinada. Un plato de pasta como la lasaña debe cocinarse parcialmente y colocarlo en capas, y mejor en una fuente que pueda ir del congelador al horno; se mete en el horno congelada y termina de cocinarse a la vez que se descongela.

Platos como alubias con arroz, sopas y muchas empanadas y tartas suelen congelarse bien. Un burrito de alubias puede congelarse cocinado y montado, solamente hará falta calentarlo para que quede perfecto. En el caso de los burritos con queso, pizzas y arroces suele, se monta el plato y se congela antes de cocinarlo pues suelen cocinarse directamente, todavía congelados, y así tienen el sabor de la comida recién hecha

Las legumbres cocinadas suelen congelarse y descongelarse bien. Ante la duda, pueden hacerse puré antes de congelarlas.

Tortitas y gofres se congelan bien. Una vez cocinados, se enfrían y se congelan individualmente. Una vez congelados, se guardan en una bolsa grande. A la hora de comerlos, se pueden descongelar en el tostador.

Las salchichas o el tocino deben cocinarse dejándolos poco hechos, se descongelan directamente en la sartén y pueden terminarse de cocinar entonces.

Descongelar

Hay que descongelar o recalentar los alimentos congelados antes de servirlos. La forma en la que se han congelado los alimentos influye en a la hora de descongelarlos.

Todos somos conscientes de la necesidad de cocinar la carne a la temperatura correcta para que no haya riesgo de intoxicación alimentaria, pero pocos se dan cuenta de que descongelar la carne de la forma equivocada puede facilitar el crecimiento de bacterias patógenas.

Alimentos congelados, empaquetados y etiquetados, en el congelador.

Cómo congelar y descongelar

Enfriar cualquier comida sobrante lo más rápido posible.

Una vez que la comida esté fría, colocarla en bolsas para congelador o en un recipiente cerrado herméticamente.

Poner una etiqueta con la fecha de congelación es una gran idea, y se debe incluir también el tipo de alimento ya que puede ser difícil verlo una vez congelado.

Suele ser útil congelar los alimentos en porciones individuales. Se puede improvisar cuando no se tienen recipientes individuales. Por ejemplo, colocando una bolsa de congelar pequeña en un tazón o en un plato hondo a la hora de congelar sopa.

Todo lo que se congela debe descongelarse antes de poder comerlo. Muchos alimentos y platos pueden cocinarse directametne, aún congelados. Otros necesitan descongelarse primero.

Lo mejor es descongelar alimentos y platos durante la noche, en la nevera. Si hace falta descongelar algo rápidamente, el horno de microondas es la mejor herramienta.

Una vez que un plato esté completamente descongelado, deberá calentarse hasta que esté hirviendo.

La comida congelada debe descongelarse y calentarse una sola vez. No es adecuada para congelarlo y recalentarlo una segunda vez.

Congelar porciones de sopa

Se colocan pequeñas para congelar dentro de tazones o vasos. Se llenan con sopa y se cierran herméticamente. Se congelan dentro del recipiente. Una vez que la sopa está dura, la bolsa se puede sacar del recipiente y guardarla dentro de otra bolsa más grande. Las porciones individuales se pueden descongelar y usar según sea necesario.

La sopa se puede descongelar en el microondas. También se puede sumergir la bolsa en agua hirviendo o sacar la sopa congelada de la bolsa y calentarla en un cazo.

Pasta congelada

Para preparar pasta congelada, se cuecen 600-700 g de pasta en abundante agua con sal hasta que quede al dente. Se escurre y se divide en 4 porciones iguales. Se deja que la pasta se enfríe a temperatura ambiente antes de congelarla.

Al igual que con sopa, se colocan bolsas de congelar pequeñas dentro de cuencos o tazones. Las bolsas se llenan con la pasta cocida, se cierran y se meten en el congelador.

La pasta se descongela en agua hirviendo.o en el horno de microondas. Debe rociarse un poco de agua sobre la pasta antes de meterla en el horno de microondas.

Congelar claras de huevo

Ls claras de huevo se distribuyen en los compartimentos de una bandeja para hacer cubitos de hielo que sea flexible. La bandeja se mete en el congelador hasta que todos los cubitos estén duros.

Una vez congelados, los cubos de clara de huevo se guardan en una bolsa de plástico, bien cerrada, dentro del congelador.

Para descongelar claras de huevo, se ponen en un recipiente que se coloca dentro de otro recipiente lleno de agua caliente. Se usan como si fueran frescas.

Congelar hierbas frescas

Dado que algunas hierbas, como la albahaca, tienen más sabor y aroma cuando están frescas y son difíciles de encontrar durante los meses de invierno, congelarlas es la mejor manera de disfrutar su sabor durante la estación fría.

Las ramitas y se lavan y se secan con papel de cocina. Se pican las hojas y se guardan en una bolsa para congelar pequeñas cderrada herméticamente. Las hierbas picadas se congelan en la bolsa.

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