Fresas con nata y merengue
A casi todo el mundo le gustan las fresas con nata y quedan aún más ricas cuando se sirven con merengue crujiente. Además, con casi el mismo trabajo, pueden prepararse dos postres diferentes.
Ingredientes
Instrucciones
Hacemos el merengue
Calentamos el horno a 130º C. Forramos una bandeja de horno con papel apergaminado, dibujando un circulo en el centro del tamaño de un plato llano.
Ponemos las claras de huevo y el zumo de limón, o vinagre, en un recipiente bien limpio y las batimos con un batidor de varillas hasta que formen picos rígidos.
Seguimos batiendo hasta que el merengue tenga un aspecto esponjoso y brillante, , incorporando el azúcar en 2 o 3 veces, y lo últimos, la maicena y el extracto de vainilla.
Extendemos el merengue sobre el papel apergaminado, dentro del círculo dibujado, dejando un hueco suave en el centro, haciendo que los bordes sean un poco más altos.
Metemos la base de merengue en el horno caliente durante 1 hora. Entonces apagamos el horno y dejamos que el merengue se enfríe dentro del horno hasta alcanzar la temperatura ambiente.
Preparamos las fresas
Una vez lavadas, les quitamos los rabos y las cortamos en trozos. Las cortamos por la mitad, si son pequeñas, en cuartos o en rodajas si son grandes. Las dejamos aparte hasta que se vayan a usar, mejor dentro del refrigerador.
Montamos la nata
Ponemos la nata líquida en otro recipiente y la montamos batiendo con un batidor de varillas, incorporando el azúcar glas y el extracto de vainilla al final.
Terminamos de montar el postre y servimos.
Para hacer una pavlova de fresas, ponemos la base de merengue en una fuente, extendemos la nata montada por encima y distribuimos las fresas sobre la nata.
Para hacer Eton mess, mezclamos las fresas con la nata montada en un recipiente y después incorporamos el merengue, roto en trozos.
Servimos.
Notas
Se puede utilizar una batidora eléctrica con varillas. En ese caso, es mejor empezar a batir a baja velocidad hasta que se forme un poco de espuma, o la nata empiece a espesar; después se puede subir la velocidad. Así se incorporan burbujas de aire más pequeñas y el resultado será más estable y cremoso.
El merengue no se cuece sino que más bien se seca en el horno a calor muy bajo. Hay otros métodos que también funcionan para secar el merengue.
- Se puede calentar el horno muy alto, al máximo, apagarlo y meter la bandeja en la parte más baja, cerrar la puerta y no abrirla durante varias horas, 5-6 horas.
- Si se tiene un armario calientaplatos, también se puede utilizar para secar el merengue, aunque tardará toda la noche.
Si las fresas no son muy dulces, pueden mezclarse con 1-2 cucharadas de azúcar y refrigerarse durante media hora.
Ahorrar tiempo
Se puede quedar muy bien con muy poco trabajo si se utiliza una base de merengue ya preparada o merengues de repostería. Se convierte en un postre que no necesita cocina y es algo muy fácil de hacer. Si además se compra la nata ya lista, solo hay que preparar las fresas y terminar el postre.
Origen
Puede servirse como postre para invitados en cualquiera de sus dos versiones. En este caso, se puede preparar un coulis de fresa como salsa para este postre. Basta triturar 200 g de fresas, lavadas y cortadas, y pasar el puré por el chino o un colador de malla fina. Este puré de fresa se endulza con 2 cucharadas de azúcar glas. La salsa se vierte por encima del postre.
El nombre de Eton mess se refiere al origen de ese postre y al hecho de que se sirve cada año con motivo del tradicional partido cricket entre los colegios de Eton y Harrow. Es una forma deliciosa de servir fresas con nata y mrengue.
Para saber más sobre las claras a punto de nieve ver cocinamos huevos.