Cerdo con salsa de vino blanco

Este plato se puede hacer con chuletas con hueso, filetes gruesos de cinta de lomo o solomillo de cerdo cortado en medallones.

Fundimos 15 g de mantequilla en una sartén grande de fondo grueso a fuego medio. Añadimos el aceite y giramos la sartén para que se mezclen y seguimos calentando hasta que el aceite tome color tostado.

Ponemos la carne en la sartén, con el hueso hacia el centro si son chuletas. La freímos 1 minuto a fuego vivo, le damo la vuelta y las freímos 1-2 minutos por el otro lado. Bajamos el fuego, tapamos la sartén y seguimos cocinando la carne 4 minutos. Las damos la vuelta, volvemos a tapar la sartén y la hacemos 5 minutos más. Sazonamos la carne con sal y pimienta, la pasamos a un plato y la mantenemos caliente.

Retiramos la grasa de la sartén, dejando 1 cucharada. Echamos las chalotas y las salteamos 1 minuto. Agregamos el ajo y lo salteamos 30 segundos, hasta que se vuelva fragrante. Añadimos el vino y dejamos que hierva hasta que se reduzca a la mitad, tardará 1-2 minutos, mientras rascamos la sartén con una cuchara de madera para separar el residuo tostado pegado en el fondo.

Echamos el caldo en la sartén, junto con el jugo que haya soltado la carne mientras reposaba. Dejamos que la salsa hierva hasta que tenga la textura de un almibar espeso, 3-6 minutos.

Retiramos la sartén del fuego y añadimos el resto de la mantequilla, girando la sartén hasta que se disuelva y se mezcle con la salsa. Finalmente, añadimos unas gotas de zumo de limón, griando la sartén de la misma forma. Echamos la salsa sobre la carne y servimos.