Tortillas de maíz

Las tortillas mexicanas de maíz son especiales porque se hacen con harina de un cereal cocido, no crudo. La harina de maíz nixtamalizado, conocida como masa harina, es la que se usa para hacer tortillas, tamales y otros platillos típicos.

Los cocineros mexicanos dan forma a las tortillas a mano. Quienes no tienen esa habilidad pueden usar una prensa para tortillas.

En un cuenco grande, mezclamos la masa harina con la sal. Agregamos gradualmente el agua tibia mientras amasamo con las manos. La masa debe quedar suave y firme, pero no pegajosa. Si la masa está demasiado seca, añadimos un poco más de agua; si está demasiado húmeda, añade un poco más de masa harina.

Dividimos la masa en pequeñas bolitas del tamaño de una nuez grande, o una pelota de golf. Las cubrimos con un paño húmedo para evitar que se sequen mientras trabajamos.

Colocamos una bola de masa entre dos trozos de papel plástico o pergamino en la prensa para tortillas. Presionamos con firmeza para aplanar la masa y formar una tortilla delgada. 

Calentamos una sartén grande a fuego medio-alto. Colocamos una tortilla en la sartén caliente y la cocinamos hasta que comiencen a aparecer pequeñas burbujas en la superficie, aproximadamente 1-2 minutos. Le damos la vuelta y la cocinamos hasta que esté bien cocida, 1 minuto más. La tortilla debe tener manchas doradas en ambos lados.

Seguimos cocinando tortillas hasta terminar con la masa. A medida que las vamos cocinando, las vamos apilando sobre un paño limpio, cubriéndolas para mantenerlas calientes y suaves mientras se cocinan otras.

Las tortillas pueden guardarse calientes hasta el momento de usarlas.