Tartas frías de queso y puerros
Pueden servirse como primer plato para la comida principal, o como plato fuerte para la cena o una comida ligera.
Ingredientes
Instrucciones
Cocinamos los puerros con el aceite de oliva en una sartén a fuego suave hasta que estén tiernos, 10-15 minutos.
Los condimentamos con el vinagre balsámico y dejamos que se enfríen.
Mientras los puerros se enfrían, condimentamos el queso con sal y pimienta, y batimos las claras de huevo a punto de nieve.
Echamos el queso sobre las claras batidas y mezclamos cuidadosamente con una cuchara de metal.
Distribuimos la mezcla de queso y los puerros en recipientes individuales de cristal, haciendo capas – queso, puerros, queso – reservando un poco de puerro condimentado para decorar.
Refrigeramos las tartas al menos 1 hora.
Terminamos decorando cada tarta con un poco de puerro condimentado y el cebollino.
Servimos las tartas de queso y puerro bien frías.
Notas
Los puerros pueden cortarse en juliana, en rodajas finas o en trozos muy pequeños.
Variaciones
Quienes prefieran un sabor menos ácido pueden sustituirse el vinagre balsámico por la misma cantidad de vino blanco.
Para darle un sabor más exótico al plato, puede añadirse una pizca de curry en polvo o garam masala a los puerros junto con el vinagre balsámico o el vino blanco.
Si no se tiene a mano queso mascarpone, puede utilizarse la misma cantidad de queso cremoso.
Además de cebollino, este plato puede decorarse con consomé frío, hecho gelatina, picado.