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Recetas con calabací­n

Lista de recetas que contienen calabací­n como ingrediente.

Tortilla hortelana

Una tortilla deliciosa que lleva los mejores productos de la huerta.


Sopa de pepino y calabacín con yogur

Una sopa fría ideal para el verano, no sólo es refrescante sino que además no hace falta arrimarse al fogón y pasar calor de esa forma.


Arroz con frutos del mar

Un plato bastante que tiene un poco de todo, pescado, verduras y carbohidratos, y es bajo en grasa. Se convierte en un plato completo si se sirve acompañado de verduras al vapor.


Puré de calabacín y patata con puerro

Esta sopa es adecuada para toda la familia, fácil de digerir y fácil de hacer. Los ingredientes se pueden encontrar durante todo el año en las tiendas, no sólo en temporada, y resulta un primer plato barato.


Pescado al estilo isleño

Un plato de pescado ligero y nutritivo, con calabacín, pimiento y tomate, las mejores hortalizas mediterráneas.


Salsa siciliana de lentejas

Esta salsa siciliana de lentejas requiere algo más de preparación,  pero ¡oh! El resultado vale la pena.


Minestrone veronesa

A pesar del gran número de ingredientes, la preparación de esta sopa tradicional del norte de Italia es realmente sencilla. Todo el trabajo está en simplemente cortar las verduras y el jamón.


Calabacines al horno con mozzarella

Estos calabacines al horno admiten todo tipo de tropezones, están listos en menos de media hora y son perfectos para compartir.


Crema de calabacín al queso

Una de las recetas más rápidas y sencillas, que además funciona con muchas otras verduras y hortalizas. Puede servirse tanto fría como caliente. Esta sopa siempre tiene éxito.


Tortitas de calabacín y queso

Ideales para la cena o una comida ligera, junto a un plato de sopa, para una merienda-cena, o para desayunar a la americana durante el fin de semana.


Calabacines al horno con hierbas de Provenza

El suave sabor del calabací­n se anima al añadir hierbas de Provenza.


Lasaña de calabacín y ternera

El nombre nos puede llamar a engaño por dos razones. En primer lugar, carece en absoluto de las clásicas láminas de pasta y se parece más a la musaka griega que a la lasaña italiana. En segundo lugar, el origen de esta receta se encuentra en un importante concurso de cocina de los EE. UU.