mezclar

La avena libera energía lentamente y eso es lo que un niño necesita por la mañana. Los frutos secos aportan los nutrientes que se necesitan para equilibrar la dieta.

Salmón ahumado, bechamel, mayonesa, nata parcialmente montada y gelatina.

¿Quién dijo que las ensaladas son solo para el verano? esta ensalada de pera, frutos secos y queso azul aprovecha ingredientes disponibles en otoño e invierno.

Un tipo de pasta al huevo que se hace en Alemania. Se puede servir sola, salteada en mantequilla, o con diferentes salsas.

Una salsa parecida al hummus pero menos calórica porque no incluye tahini.

La sopa de aguacate se puede servir tanto caliente como fría.

Una deliciosa tarta que sólo necesita refrigerarse. No se trata de un postre sofisticado pero los platos quedan limpios. Se hace rápido con ingredientes de la despensa, así que puede sacarnos de más de un apuro.

Las mermeladas clásicas están muy ricas pero no saben a fruta fresca. Las mermeladas sin cocción, por el contrario, conservan el sabor natural de la fruta y muchos de sus nutritentes.

La carne de cerdo acepta todo tipo de condimentos y sabores, dulces como la manzana, o muy especiados, como esta mezcla.

Este aliño va muy bien con ensaladas de lechuga. Si se deja espeso, con menos líquido, queda muy bien con ensaladas de patata cocida.

Esta ensalada se puede servir como primer plato, como una cena ligera o como parte de una mesa abierta. Es muy refescante.