Fiesta

Cuando se habla de turrón blando, seguro que se trata del turrón de Jijona. Un dulce delicioso que se hace con ingredientes muy simples, almendra molida, miel, azúcar y clara de huevo.

El turrón duro por excelencia. Como es difícil de cortar, lo mejor es hacerlo en moldes pequeños. Las almendras se tuestan y se ponen enteras, para que sea más fácil partirlo.

El guirlache es delicioso, tanto que muchas veces se encuentra en las confiterías todo el año, y no sólo en la época de las fiestas.

Este turrón no es más que mazapán enriquecido con yemas de huevo y por eso se endurece facilmente. Lo mejor es hacer un bloque grande del cual se cortan tabletas a medida que haga falta, y después estas se trocean en dados.

Es muy fácil hacer turrón de chocolate en casa. No hace falta ningún cacharro especial, aunque tener un hervidor doble para derretir el chocolate ayuda, no es esencial porque se puede improvisar un baño María, o se puede derretir el chocolate en el horno de microondas.

Se trata de un caldo clarificado, de color oscuro y sabor intenso. En invierno, puede servirse caliente con unas verduras en juliana. En verano, puede servirse frío y gelatinizado, cortado en dados y acompañado de pan tostado.

Una bebida caliente y reconfortante para recibir a los invitados en los fríos días de invierno. También sirve para acompañar al postre. Se recomienda utilizar un vino tinto que tenga mucho cuerpo.

Las coles de Bruselas son un acompañamiento clásico de un asado durante las fiestas invernales y en esta receta van acompañadas de castañas que les dan un contraste de sabor y textura.

Son pasteles tradicionales de las navidades inglesas. Se trata de una tarta de masa quebrada enriquecida dulce, cubierta y rellena de picadillo de frutas. Se puede hacer un solo pastel pero lo más normal es hacer tartas individuales.

Este picadillo de frutas se puede utilizar en una dieta de eliminación de productos lácteos, además resulta algo más ligero al no tener mantequilla ni ningún otro tipo de grasa.

El picadillo de frutas es el relleno tradicional para las tartaletas que se sirven durante las navidades en Inglaterra. Esta receta produce un picadillo de frutas cuyo sabor mejora con el tiempo, y por eso es perfecto para preparar por adelantado y conservarla o para hacer las tartaletas más tarde, o para envasar como regalo.