Salsas

Una salsa italiana que se ha hecho internacional ¿Para qué comprarla en bote si es tan fácil de hacer en casa? Y el pesto recién hecho sabe mucho mejor.

Esta salsa fría va muy bien con todo tipo de cintas planas.

Uno de los platos de pasta sencillos, sin nada más que pasta cocida y una salsa, pero lleno de sabor. La salsa es tan fácil de hacer como el pesto genovés.

Esta salsa fría va bien con el salmón asado o al vapor; también con trucha y otros pescados con sabor fuerte. Podría ser un buen condimento para patatas nuevas.

En este caso, la pasta se sirve fría. Esta receta puede utilizarse como base para una ensalada de pasta.

La salsa fudge caliente se puede considerar una salsa de tofe al chocolate con la salvedad de que la salsa de tofe sale mejor con mantequilla sin sal y la salsa fudge queda muy bien con mantequilla salada. Se sirve con tartas, helados y postres de fruta.

Una de las tapas más populares. Son esencialmente patatas fritas en dados acompañadas de salsa brava, una salsa picante que tiene muchas versiones.

Uno de los condimentos más característicos de la cocina británica comparable al ketchup de tomate norteamericano. Sirve para condimentar todo tipo de platos, desde bacon o salchichas fritas, hasta un bocadillo de queso.

Un aliño que va muy bien con ensaladas de lechuga, ensaldas de patata cocida, y ensaladas de pepino. También puede hacerse una versión más ligera con yogur y zumo de limón.

Un aliño que puede sustituir a la mayonesa pero más ligero porque no tiene aceite.

Una receta inspirada en el hummus y puede utilizarse de forma similar, para mojar triángulos de pan pita tostados o triángulos de maíz  como aperitivo, o como acompañamiento para veduras crudas.

Una salsa que va bien con marisco cocico, como langosta, cigalas, langostinos, gambas o cangrejo. También se puede utilizar con ostras, vieiras, y otros moluscos abiertos al vapor.