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Una fiesta de Pascua

Hay docenas de buenas razones para que los “niños” de todas las edades celebren la Pascua.

La Pascua no es la mayor fiesta del año, pero a veces parece que debería serlo.El día de Pascua es como el día Navidad en primavera, pero mejor ya que el clima es mucho mejor. Ofrece una oportunidad para colocar algunos floreros, o macetas, alrededor de la casa que traigan la alegría del jardín y del aire libre al interior. Es también un buen momento regalar flores pues son capaces de  curar cualquier residuo de tristeza invernal.

Es también una oportunidad para decorar la casa y una que las decoraciones estén puestas, seguro que habrá suficiente entusiasmo para planificar la búsqueda de huevos de Pascua, que es una de las costumbres más divertidas de los países anglosajones, que muchos otros han adoptado. Preparar los huevos es fácil y una excelente oportunidad utilizar la creatividad. Uno puede pasarse horas imaginando diseños y haciendo pruebas. Luego hay que organizar la propia caza...

Esta parte de la celebración de la Pascua puede ser tan divertida para los adultos como para los niños. No sólo se disfruta enormemente al dibujar algunos mapas interesantes y diseñar rompecabezas que los niños puedan resolver, pero es genial ver como sus ojos se iluminan cuando encuentran uno de los tesoros escondidos.

La Pascua no es una ocasión sólo para niños pequeños, pero sí presenta la oportunidad de dar a los niños algunos regalos pequeños; lo cual es especialmente bueno si los cumpleaños y los santos quedan muy lejos, y la Navidad les puede parecer que aún queda a años luz. No se trata de regalar cosas caras, sino un detalle que les haga recordar. Y los detalles para los niños “ya mayores'' son igual de buenos. Un suéter personalizado todavía será muy apreciado esta época del año. Y cuando se celebra a lo grande, también se puede pensar en las cestas de Pascua.

Y ¿qué pasa con las golosinas?

Grandes y pequeños, por igual, harán que esas golosinas de Pascua desaparezcan en un abrir y cerrar de ojos. Ciertamente hay huevos y figuras de chocolate a la venta en todas partes. Pero también se pueden hacer en casa, y toda la familia disfrutaré el esfuerzo.

Mientras se está en la cocina, es un buen momento para pensar en el menú. Dependiendo de cómo se organice el día, se puede pensar en hacer algo especial desde el momento del desayuno. Se puede desayunar pronto y comer a la hora de siempre, o se podría hacer un desayuno-almuerzo (brunch) a media mañana, y comer más tarde de lo normal. Los bollos suecos para café son tradicionales en ese país y podrían ser un buen comienzo para el día, o niños y mayores podrían disfrutarlos durante la búsqueda de los huevos de Pascua. También se podría considerar algo como los estratos de jamón y queso para el brunch, para la cena, o para la hora del desayuno, los que estén acostumbrados a desayunar fuerte.

También se puede considerar uno de los panes tradicionales de Pascua, como el pan de Pascua ruso, el pannetone italiano, o una mona de Pascua. Todos van bien con una taza de chocolate. Esta tradición es un símbolo de la fiesta e igualmente algo agradable al paladar moderno. Se pueden seleccionar algunas recetas de todo el mundo y probar algo nuevo para acompañar a lo tradicional.

Cuando el día va a estar ocupado con la búsqueda de los huevos escondidos, cualquiera querrá hacerse la vida fácil en la cocina, y escoger una cena poco complicada de preparar. Ya se escoja el tradicional asado de cordero o un jamón al horno, o se escoja algo totalmente novedoso, la comida familiar no podrá ser más placentera en esta ocasión. Después de todo el esfuerzo de preparar los regalos, la planificación de la búsqueda de huevos de Pascua, y así sucesivamente, cualquiera estará listo para una comida sencilla aunque sea una comida de fiesta.

Como recompensa por todo ese trabajo, un par de copas de Pascua están a la orden del día. Ya se prefiera un simple vino tinto, un combinado, o un licor fino, es la hora de poner los pies en alto y relajarse. Incluso un buen cava podría ser la bebida perfecta para celebrar un día que se ha convertido en un día de fiesta perfecto para todos.

¿Quién dice que la Navidad es el único día de fiesta familiar que todo el mundo encuentra divertido y conmovedor? ¡Se puede celebrar la Pascua!

A la caza de huevos de Pascua

La tradición de los huevos de Pascua se remonta a siglos atrás, en una forma u otra. Como símbolo de la fertilidad y la nueva vida, los huevos plantados alrededor de la casa traen a la mente el renacer de la primavera. Se puede incorporar la misma sensación de alegría a la caza de huevos de Pascua y hacer que sea algo divertido para toda la familia.

Por eso se decora la casa en un estilo festivo, para crear el mejor ambiente. Encontrar los huevos escondidos es un acontecimiento grande para los niños, y decorar la casa, por dentro y por fuera, realmente puede crear esa sensación de fiesta especial. Colocar unos ramos de flores amarillas, o de colore, en floreros y macetas en las terrazas. Se puede colgar una corona de Pascua en la puerta. Y hacer un árbol de Pascua con unas ramas desnudas donde se cuelguen huevos y conejitos de Pascua.

Antes de esconder ningún huevo ni preparar ninguna cesta, ocultar cualquier huevo o cestas, Hay que decidir qué tipo de huevos de usar y lo que debería ponerse en las cestas.

Los huevos pueden ser reales, artificiales, o ambos. Los huevos reales pueden decorarse, y esta actividad es motivo de diversión. Padres e hijos pueden pasárselo muy bien preparando y ejecutando todo tipo de diseños interesantes, es algo que no cuesta mucho dinero y es tiempo que pasan juntos. Los huevos artificiales tienen la ventaja de ahorrar algún tiempo y se pueden poner todo tipo de sorpresas agradables en su interior. Pueden contener chocolates, caramelos, pequeños juguetes, joyas y mucho más.

Del mismo modo, las cestas se pueden llenar con cualquier objeto o golosina que se ajuste al tema. En casa, todo tipo de cosas, desde linternas en miniatura hasta un cachorro y un gatito, han encontrado un hueco en las cestas que los niños debían encontrar. Conejitos de chocolate rellenos de caramelos, barajas, juegos de magia, o un millar de otros artículos pequeños son capaces de llenar de alegría a los corazones jóvenes.

La diversión suele ser mayor cuando la cesta de Pascua es lo primero que hay que encontrar. Hay cientos de maneras creativas de organizarlo. Una forma es dibujar un pequeño mapa que ayude a navegar por la casa, o colocarla en el centro de un laberinto y que toda la familia vaya al sitio. Dar pistas al estilo de la caza del tesoro es otra forma. Pero no ese trata de hacer esta primera fase muy larga, lo mejor es pasar a la búsqueda de huevos bastante rápido para evitar frustraciones.

Una vez que el 'cazador' afortunado tiene la cesta en la mano, empieza la diversión real. Una mezcla de huevos fáciles de encontrar con otros muy bien escondidos y que presentan un desafío es ideal y resultará en una búsqueda equilibrada. Los huevos fáciles de encontrar son el incentivo que los pequeños necesitan para continuar, ya que ven la recompensa de inmediato. Pero los que necesitan un poco más de tiempo y esfuerzo para poder encontrarlos hacen que el juego se desarrolle para ellos como si fuera una película interesante en la que están ansiosos de descubrir lo que viene a continuación.

Cuando se planifica una cacería de huevos de Pascua para varios niños, como una fiesta, se ponen realmente a prueba nuestras habilidades como planificadores. Es un esfuerzo que merece la pena y es parte de la diversión para el organizador, o los organizadores, porque también se puede pedir ayuda. Hay varias maneras de llevar a cabo esta tarea.

Se puede organizar a los niños por grupos y cada grupo seguir un conjunto de pistas diferente. Cuando sólo ellos conocen las pistas que sirven de guía, las probabilidades de que otro grupo halle sus tesoros son muy bajas. También puede organizarse una competencia amistosa en alguna de las fases haciendo que todos los grupos trabajen juntos. Saber qué método a seguir, y hasta qué punto, sólo depende de la personalidad individual, la edad y las habilidades de los niños que participan en la búsqueda.

Merece la pena planificar la búsqueda de huevos de Pascua en lugar de tener sólo una cacería libre donde todo el mundo busca al azar. Los niños se divertirán mucho más, y también disfrutarán más los mayores al contemplar sus progresos.

La comida de Pascua

El día puede comenzar con una búsqueda de huevos animado, pero el día de Pascua puede celebrarse con una comida estelar. Aquí hay algunas recetas que prácticamente garanticen ese resultado.

Cordero asado con ajo, romero, limón y patatas

Cordero asado con salsa de vino y hierbas

El jamón es una carne tradicional para el día de Pascua y no tiene que reservarse exclusivamente para la comida. Naturalmente, ya que es Pascua, los huevos son también el ingrediente del día. Pero vamos a hacer algo que va un poco más allá de la mera combinación de jamón y huevos convierte un plato ordinario en una comida de celebración.

Jamón asado con piña

Jamón asado con miel y salsa de sidra

Jamón asado con glaseado de naranja

Salsas y guarniciones

Chutney de manzana y pimiento

Ensalada con brócoli y aceitunas

Desayuno o cena

Puede reunirse a la familia para un desayuno de Pascua temprano en la mañana, a la hora del desayuno tradicional, o más tarde, puesto que en los días de fiesta todo el mundo se queda un poco más en la cama. Pero, sea a la hora que sea la comida, que está destinada a ser una ocasión especial. Preparar algo especial es, afortunadamente, muy simple.

Estratos de jamón y queso

Pan de Pascua ruso

Dulces

Para celebrar dulcemente el final del invierno y el comienzo de la primavera.

Huevos de crema y chocolate

Huevos de Pascua de fruta y nueces

Bollos suecos para café

Pannetone

Galletas de jengibre

Galletas de jengibre sin mantequilla

Dulces crujientes o dulces de mantequilla de cacahuete y miel

Bebidas de Pascua

Cualquiera que sea la bebida apropiada para acompañar la comida que se piensa servir, o que haga juego con nuestro estado de ánimo, se trata de disfrutar de una copa en el día de Pascua y levantar un vaso para brindar porque estamos de fiesta.

El vino es una bebida perfecta para las vacaciones de Semana Santa, y especialmente para celebrar la Pascua. Como se trata de una época de renovación, puede resultar bien un vino joven y afrutado, que añadirá el toque justo para celebrar esta fiesta ancestral.

No será ninguna sorpresa para los amantes del vino espumoso saber que el champán, el cava, o son un complemento perfecto para un brunch de Pascua. Las delicadas burbujas blancas y espumosas son el complemento perfecto para cualquier tipo de alimento, incluso con un poco de queso brie.

Pero para aquellos que planean aprovecharse del chocolate que es tan típico en Pascua, se puede explorar el emparejamiento del vino y el chocolate. Un vino tinto aterciopelado, de color rojo oscuro podría ser más apropiado. Siempre se puede afirmar que se trata únicamente de consumir una buena cantidad de antioxidantes. O bien, simplemente se puede declarar que el propósito de un día de fiesta es celebrar.

Un vino con Cabernet Sauvignon como base, que son uvas que parecen hechas para la Pascua será un vino lleno de notas frutales, con un aroma embriagador, que irá igual de bien con pan, queso o chocolate.

El jamón y el cerdo se consideran carne blanca. Si se sirve jamón asado, un vino blanco podría ir mejor, con Zinfandel o Syraz, florales y afrutados, ofrecería el equilibrio perfecto entre acidez y dulzura.

Si se sirve cordero asado, irá bien un buen vino tinto, un Rioja, Borgoña o Burdeos de calidad.

Pero el vino no es la única bebida que le va a este día. Hay combinados dulces, como el conejo de Pascua o el Chambord spritzer, que le van muy bien en un día como ese.


Una fiesta de primavera para niños