Postres
Mousse rápido de chocolate
Los malvaviscos, o marshmallows, son golosinas con una base de azúcar, clara de huevo batida y gelatina batidos hasta que tengan una consistencia esponjosa. Los hay de varios sabores. Esta receta utiliza malvaviscos cubiertos con chocolate.
Dulce de cacahuete (fudge)
Hay muchos tipos de dulces que se pueden hacer con mantequilla de cacahuete, pero el fudge es siempre uno de los favoritos. Esta receta es muy simple.
Galletas con mantequilla de cacahuete
Si se está buscando galletas con mantequilla de cacahuete esta es una buena receta para empezar.
Galletas blandas de melaza
Unas galletas de color oscuro que tienen el corazón blando y un sabor cálido debido a las especias que contienen.
Abanicos de manzana
Fácil, rápido y delicioso, este es un postre que también puede servirse como guarnición con ciertos tipos de carne.
Fruta de verano asada
La fruta asada al horno o a la parrilla es una solución para presentar un postre diferente y quedar bien sin tener que pasarse horar en la cocina.
Arroz con leche de Anita
Esta receta de arroz con leche es un poco más elaborada que las recetas ordinarias. El arroz está enriquecido con huevo y aromatizado con brandy.
Melocotones en almíbar
Son muy fáciles de hacer en casa. Se pueden hacer en gran cantidad y envasarlos en recipientes de vidrio esterilizados para poder disfrutarlos cuando se quiera.
Copas de melocotón y yogur
Este es un postre ideal para los días de dieta, y aún más si se hace con yogur desnatado. Calmará cualquier capricho por tomar algo dulce.
Melocotones y frambuesas con salsa de fresa
Estar a dieta para perder peso no significa renunciar por completo al postre. He aquí una receta dulce pero con menos azúcar, llena de vitaminas y poder antioxidante.
Tartaletas de melocotón y nata
Las tartaletas de melocotón y nata son un postre dulce para quedar bien pero que no lleva mucho trabajo. También se pueden servir con el café o a la hora de la merienda.
Budín de verano
Un postre delicioso que no necesita horno. Sólo hace falta dejarlo suficiente tiempo en la nevera, con un peso encima, para que el pan absorba el zumo de la fruta.